![]()
La Asamblea Nacional de Venezuela aprobó este martes por unanimidad declarar persona “non grata” a la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, tras acusaciones del Gobierno venezolano sobre una presunta operación de falsa bandera concertada con Estados Unidos para generar un conflicto internacional en el Caribe.
La decisión parlamentaria fue precedida por la suspensión de los acuerdos gasíferos con Puerto España, medida tomada por el presidente Nicolás Maduro a solicitud del Ministerio de Hidrocarburos y la directiva de PDVSA.
Acusaciones de complot y advertencias diplomáticas
Según Caracas, estaría en curso una operación encubierta desde aguas limítrofes con Trinidad y Tobago —o incluso desde su territorio— que buscaría provocar un enfrentamiento militar completo contra Venezuela. El canciller Yván Gil advirtió que el Gobierno trinitense fue notificado de estos planes, supuestamente revelados tras la captura de un grupo mercenario con información directa de la CIA.
“El Gobierno de Trinidad y Tobago debe decidir si se pone del lado de la paz o se hunde en la agenda de la CIA”, afirmó Gil, al tiempo que exigió a Puerto España no permitir que su territorio sea utilizado para maniobras que amenacen la estabilidad regional.
Lea Tambien: María Corina Machado: “Maduro inició la guerra, Trump la está terminando”
Reacciones cruzadas y deterioro diplomático
La tensión se intensificó con la llegada del destructor estadounidense USS Gravely a Puerto España, calificada por el ministro Diosdado Cabello como una “provocación directa”. Por su parte, Persad-Bissessar ha mantenido una postura crítica hacia Caracas, respaldando públicamente las acciones militares de EE.UU. en la región y ordenando a su Guardia Costera el uso de “fuerza letal” contra embarcaciones no identificadas provenientes de Venezuela.
El presidente Maduro calificó estas declaraciones como una “casi declaración de guerra”, mientras que la vicepresidenta venezolana acusó a la primera ministra de sumarse a un “plan guerrerista” impulsado por Washington.
Escenario regional en tensión
Las relaciones entre ambos países, separados por apenas 11 kilómetros en su punto más cercano, atraviesan uno de sus momentos más críticos. Desde junio, Caracas ha denunciado la captura de presuntos mercenarios con armas de guerra provenientes de Colombia y Trinidad y Tobago, mientras que Puerto España ha negado cualquier implicación.
En este contexto, Venezuela ha reiterado su llamado a la comunidad caribeña a no prestarse a juegos geopolíticos ajenos, en defensa de la soberanía y la paz regional.
redinfodigital.com — Red de Información Digital
Informamos. No opinamos.

