En un anuncio reciente, Jorge Rodríguez, designado para los diálogos de paz por Venezuela, informó sobre una propuesta al gobierno de Nicolás Maduro para restringir los viajes de ciudadanos venezolanos a Estados Unidos.
Esta medida surge como respuesta a la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, reactivada por el expresidente Donald Trump, que permite la deportación de migrantes a El Salvador bajo acusaciones de terrorismo, sin el debido proceso.
Rodríguez expresó su preocupación por la seguridad de los venezolanos en territorio estadounidense, afirmando: *«Ese no es un país seguro en estos momentos. En Estados Unidos no hay Estado de Derecho en lo que se refiere a los derechos elementales y humanos que nuestros migrantes deben tener».*
Además, hizo un llamado a los venezolanos residentes en Estados Unidos para que regresen al país, asegurando que se establecerán mecanismos para su reinserción.
*«No vale la pena que estén sometidos a ese riesgo… vénganse. Aquí mandaremos todos los aviones que haya que mandar para traer a los venezolanos a su tierra»,* añadió, reiterando el compromiso del gobierno con el programa Vuelta a la Patria.
Esta propuesta subraya las tensiones entre ambos países y pone de relieve las preocupaciones sobre los derechos humanos de los migrantes venezolanos en el extranjero.