Venezuela – Han pasado más de siete meses desde que el exgobernador del estado Nueva Esparta, Alfredo Díaz, fue detenido por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) el 24 de noviembre de 2024 en el estado Portuguesa, y hasta la fecha no ha sido presentado ante un tribunal ni se le han imputado cargos formales.
Díaz, también exalcalde y dirigente del partido Acción Democrática, fue arrestado mientras intentaba salir del país. La detención ha sido calificada como arbitraria por organizaciones opositoras y de derechos humanos, que alertan sobre una nueva ola de persecución política en Venezuela.
Es un demócrata, un luchador social, y hoy está preso por alzar la voz. Su familia ha exigido apoyo nacional e internacional para visibilizar el caso.
La Plataforma Unitaria Democrática (PUD) ha exigido su liberación inmediata y denuncia que su detención forma parte de una escalada represiva tras las elecciones presidenciales del 28 de julio, cuyos resultados han sido ampliamente cuestionados.
Mientras tanto, Díaz permanece recluido en una sede militar sin acceso a un proceso judicial transparente, sumando más de 210 días de detención sin juicio, en lo que muchos consideran una violación flagrante de sus derechos fundamentales.
